La fisura labio-palatina es una malformación congénita que afecta a 1 de cada 700 personas. Se clasifican en fisuras labiales, palatinas, que afecta al paladar duro y/o blando o fisuras labiopatinas completas que afectan al labio y al paladar. Influyen factores genéticos y externos, como medicamentos y exposición a tóxicos. Ocurre sobre la octava semana de gestación, cuando las partes del paladar superior y del labio superior se unen.